JUEGOS DE TORTAS (3): GOLDEN AXE

 

 

Por votación popular, hoy le toca el turno al JUEGO DE TORTAS (o más bien, de estocadas y sortilegios) Golden Axe. En realidad, ya se habló de él en su día en el blog de al lado pero esta serie de entradas estaría muy coja si no lo mencionáramos.

El año es 1989: la espada y la brujería están de moda. Los tebeos de la Espada Salvaje de Conan el Bárbaro eran muy populares y los quioscos estaban llenos de tipos cachas en taparrabos que, tizona en mano, apiolaban infelices en su lucha contra el mago malvado de turno.

El Golden Axe fue la primera máquina arcade de la que me vicié seriamente. Luego vendrían otras pero para aquel chaval granujiento, la posibilidad de ir repartiendo mandobles a diestro y siniestro no era para dejarla pasar.

 

Disponíamos de tres personajes para elegir: Ax Battler (un bárbaro equilibrado), Tyris Flare (una amazona de grandes poderes mágicos) y Gilius Thunderhead (un enano con casco vikingo y hacha que me resultó muy novedoso en el momento). Todos ellos habían perdido seres queridos en manos de Death Adder, el malo malísimo, y por eso le tenían una ojeriza de las de no dejar dormir. Dicho individuo había raptado a la familia real de Yuria y robado el Hacha Dorada (Golden Axe) que daba el título al juego aunque nunca quedaba muy claro si esa era la que empuñaba o la que blandía Gilius, que en las primeras versiones del juego era amarilla. 

(Ved aquí a estos siete enanitos y empezaréis a vislumbrar lo de la problemática "diversidad". El primero que me sepa identificar a los siete correctamente tiene VOTO DOBLE en las votaciones del final)

Los tres personajes disponían de magia (creo que de este juego se debió derivar que a los ataques especiales en general se les llame "magias"), que se conseguía a base de acumular pociones. 

Cuando soltabas la magia, el efecto era más gordo cuantas más pociones tuvieras. Valía la pena jugar con Tyris para ver todos los posibles hechizos. El juego tenía pequeñas fases de bonus entre niveles donde teníamos que patear a unos duendecillos para que soltaran las pociones y, en niveles avanzados, comida para curarnos (algo bastante escaso).

Golden Axe tenía ciertas novedades frente a otros juegos similares, como la posibilidad de correr dándole dos veces a la palanca o montarse en dragones para abrasar a tus adversarios (mecánicas que copiarán muchos otros juegos posteriores). 

Es interesante apuntar que, así como Gilius aparecería como invitado en otros juegos de Sega, el bichejo morado que daba coletazos ("Chickenlegs") ya había salido antes en el Altered Beast. 

El juego no permitía coger otras armas pero tenía diversas fintas dependiendo de la distancia a la que pegaras a tu enemigo (mi favorita era la que le metías dos leñazos con la empuñadura del arma en el pescuezo a tu enemigo antes de tumbarlo de una patada). La más mortífera era la que en mi barrio llamaban "la piqueta" que consistía en correr, saltar y caer apuntando con la espada hacia abajo, que normalmente era mortal para los enemigos de tres al cuarto. 

(Sufreee, mamóooon...)

En general, el salto-ataque era la opción más popular para acabar con los enemigos poco a poco, aunque las amazonas renegadas, que iban con un hacha, podían sacudirte cuando estabas en el aire.

(Ved esas plumas tamaño tabla de surf volando. Los pájaros salvajes huelen como un gallinero y gastan unos parásitos que ríete tú de los muertos vivientes) 

Los decorados del juego eran muy originales y las diferentes fases nos llevaban por un pueblo situado en una tortuga gigantesca o a lomos de un águila colosal en cuya espalda había un descampado lleno de esqueletos con cimitarras (???). Además de los enemigos (los esqueletos eran especialmente desagradables), había abismos por los que podíamos caernos y perder una vida (en los recreativos de mi barrio solo tenías una), aunque resultaba muy satisfactorio cuando lograbas que se despeñara algún malo.

Los enemigos más espectaculares, como suele ocurrir, nos los encontrábamos al final de cada nivel. 

Algunos tenían truco (sobre todo si ibas montado en un dragón), pero por lo general había que lidiar con ellos por las malas. Recuerdo especialmente a los "gordos con martillo", que solían salir por parejas, y al "caballero blanco", todos ellos con gran alcance, resistencia y haciéndote un estropicio si te tocaban.

El éxito del Golden Axe supuso un buen número de secuelas en las que no tardaron en librarse de los protagonistas originales (pedirían mucha pasta,  yo que sé) :

GOLDEN AXE II

Básicamente, nuevos niveles y pequeños cambios cosméticos (Ax llevaba una hombrera, al enano le pusieron muñequeras...). Solo salió para MegaDrive y en arcade en Japón. 

 

GOLDEN AXE: Revenge of Death Adder.

Por algún ignoto motivo, aquí decidieron quitar a los personajes originales y meter a otros cuatro con el carisma de un cubo de fregar: un bárbaro clavado a Ax (hasta sus calzoncillos eran azules), un gigante que llevaba a Gilius en la chepa (el gigante era de talla normal pero a Gilius lo encogieron), una mujer centauro y un gilipollas con tridente cuyo poder mágico era hacer que crecieran manzanas.

Como detalle interesante, el juego incluía bifurcaciones que permitían ir por diferentes fases. 

Y hay muchas más: Golden Axe III (bastante cambiado respecto al original), Golden Axe Beast Rider (en 3D, con Tyris de protagonista montando dragones), Ax Battler: A Legend of Golden Axe (cambiando el juego de lucha por un juego de rol estilo Zelda), Golden Axe: The Duel (de combates uno contra uno como el Street Fighter o el Mortal Kombat) y el Alien Storm (que,  técnicamente no era una secuela sino una fotocopia de la propia Sega, el mismo juego con una capa de pintura de aliens por encima).

¿Qué juego de tortas queréis que comente a continuación? 

• Final Fight 
• Dungeons and Dragons
• Captain Commando
• Cadillacs and Dinosaurs (este era un claro favorito la otra vez)
• Double Dragon
• Otro

¡A ver esos votos en los comentarios!