10/04/2024

Barcode Battler: el juego de los códigos de barras

A finales de 1993 las revistas de videojuegos ofrecieron publicidad de una máquina muy curiosa, una especie de "maquinita" o Game & Watch con la novedad de incluir una serie de tarjetas ilustradas con personajes a lo Dungeons & Dragons.

 


 

La máquina se llamaba Barcode Battler II y otra de sus novedades es que las tarjetas llevaban un código de barras, código que se supone generaba unos valores de poder y resistencia para el personaje. Por otro lado, además de personajes (héroes y villanos), había cartas de equipo (armas) y hechizos. Pero lo más original es que podías intercambiar los códigos de barras por otros que tuviesen en casa...

 


 

Así, lo mismo el código de barras del tomate frito Orlando le daba mucho poder a tu personaje preferido mientras que el de un Bollycao podía ser una birria. 

 


 

Se supone que la cosa consistía en probar con todos los códigos de barras que hubiese por casa, seleccionar los mejores y enfrentarte a tu rival en la misma Barcode Battler (un jugador con los botones de la derecha y el otro con los de la izquierda). Ojo, digo "se supone" porque yo nunca llegué a tener una Barcode Battler, aunque siempre me llamó mucho la atención. 

 

"El conflicto del comercio" (puedes leer el trasfondo del juego ampliando la foto)".

 

El problema estaba en el precio, ya que en esa época por 9.900 pesetas te podías comprar un videojuego bastante interesante, mientras que esta "maquinita", a pesar de las tarjetas tan bonitas, hacía suponer que el juego en sí sería bastante mediocre. Pero, ¿lo era? Hobby Consolas llegó a decir incluso que era un juego de rol... 

"El Barcode es un juego de rol basado en la estrategia, en el que los personajes aparecen bajo la forma de simples números. Tres valores determinan la resistencia de cada guerrero y su poder ofensivo y su poder defensivo. Estos pueden aumentarse según el arma o hechizo que introduzcáis a golpe de código de barras". (HC #24, septiembre de 1993).

 Y nos explicó, por encima, su funcionamiento:

"Al principio contaréis con un guerrero y un mago, que podéis elegir entre los que incluye el juego o crearlo con un código de barras de vuestra elección".

Y es que, según la revista, el Barcode traía 26 tarjetas ilustradas y otras cinco en blanco para que pudieses pegar tus propios códigos de barras.

 


 

"Vuestra misión consistirá en recorrer los cuatro sistemas de la Nebulosa Barcode (compuestos de cinco niveles y un enemigo final) derrotando a todos los enemigos que os proponga la computadora".

"A la hora de luchar deberéis actuar con calma y aprovechar vuestras cartas, haciendo un alarde de rapidez mental y grandes facultades estratégicas".



 

El Barcode Battler venía avalado por unas fantásticas ventas en Japón (1.200.000 unidades), había sido elegido juego del año en Francia y "en Gran Bretaña ha tenido una aceptación asombrosa".

 

A la venta el 15 de septiembre (¡derrota al Gran Emperador!).

 

La "maquinita" o consola había sido diseñada por la empresa japonesa Epoch y aquí en España la distribuyó Bizak, la juguetera bilbaína especializada en juegos de mesa. Respecto a esto último, y como ya vimos en otra ocasión, parece ser que las empresas de juguetes españolas intentaron arrimarse al carro de los videojuegos de alguna forma, como ya había hecho antes Famosa con el Game Genie.

 


 

Bizak se anunció varios meses en Superjuegos y Hobby Consolas. Con esta última llegaron incluso a algún acuerdo para promocionarla con un sorteo de 100 Barcode Battlers.  

"Las previsiones de venta son muy optimistas, tras el éxito logrado en Japón" (Superjuegos #18, octubre de 1993).

A mí me da la impresión de que aquí en España pasó con más pena que gloria, más que nada porque nunca vi a nadie con una ni se volvió a escuchar nada de ella tras estos primeros meses de promoción.



 

En fin, ¿recordabais el Barcode Battler? Y lo más importante, ¿alguien tuvo uno y lo probó?

 

4 comentarios:

  1. Recuerdo vagamente los anuncios de la tele y no entender de qué hablaban. Y puede que algún amigo del colegio lo mencionase pero ya. Claro, si encima valía casi diez mil pesetas (el Hero Quest valía algo así) normal que se comiera los mocos...

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    1. ¡Ostras! Anuncios en la tele no recordaba.

      Exacto, un HeroQuest costaba unas 10.000 pesetas y por ese precio en esa Navidad salieron muchos videojuegos interesantes.

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  2. Yo lo tuve. Me pasé meses recortando códigos de barras y solo me salió uno legible que era un arma que además no era gran cosa. Por lo demás era un juego de combate por turnos sin demasiada chicha más allá de la gracia de los códigos de barras.

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    1. Por lo que me han dicho, los códigos de barras españoles no daban buenas características :-(

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